Es común que al asistir a una entrevista laboral, el reclutador realice algunas preguntas para conocer tu situación sociodemográfica, esto es parte del proceso de selección y es completamente normal que deseen saber datos como tu zona de residencia, estado civil o número de hijos. Sin embargo, para algunos candidatos responder estas preguntas puede resultar incómodo o extraño.
Algunas personas consideran que los reclutadores no deberían realizar estas preguntas al momento de llevar a cabo un proceso de selección, puesto que estos datos no se relacionan directamente con sus capacidades para realizar un trabajo en especifico. Ya que su edad, estado civil o zona de residencia no los hace más o menos capaces de desempeñarse en un puesto.
Hasta cierto punto, lo anterior es cierto. Las características sociodemográficas de una persona no determinan su capacidad para realizar determinadas actividades de un puesto de trabajo, sin embargo, debemos recordar que un perfil dentro de una empresa no se compone únicamente de las funciones a desempeñar, sino de muchos otros factores.
¿Por qué es importante esta información?
La labor de un reclutador es asegurarse de que el próximo colaborador de una empresa sea el adecuado para la vacante en todos los sentidos, es decir, que además de cumplir con la formación, experiencia y capacidades necesarias para las actividades del puesto, también sea una persona que se sienta cómoda en dicha posición, que pueda aportar a la empresa, pero que la empresa también aporte a su vida. Los seres humanos contamos con muchas esferas dentro de nuestras vidas (laboral, familiar, pareja, amigos, escuela, etc.) y siendo el trabajo una de las ocupa la mayor parte del día a día, es importante que pueda acoplarse al resto de la manera más orgánica posible.
Los reclutadores deben hacer una especie de “predicción a futuro” sobre los candidatos, asegurándose que su tiempo dentro de la empresa será largo y provechoso, que tal vez podrá tener crecimiento a futuro y que no desertará por factores ajenos a la empresa.
Los datos sociodemográficos se preguntan para conocer tus necesidades en términos económicos, y así saber si la oferta que ofrece la empresa permitirá cubrir tus gastos, pero también para conocer las necesidades sociales del candidato como el tiempo de traslado que ocupará para llegar al trabajo y como esto podría afectar su calidad de vida, las necesidades de cuidado de sus hijos de acuerdo a su edad, la división de gastos de acuerdo a las actividades desempeñadas por los otros miembros de la familia o el tiempo que requiere una persona para actividades relacionadas al cuidado del hogar u otras actividades como el estudio y recreación.
Así mismo, los reclutadores deben asegurarse que la persona próxima a integrarse a un equipo de trabajo encaje en la estructura de la organización, lo que involucra tomar en cuenta el estilo de liderazgo de sus superiores, ambiente laboral, valores de la empresa, edad promedio de los compañeros, etc. Por lo cual es común que durante la entrevista se realicen preguntas enfocadas a conocer cómo podría adaptarse el candidato a estas situaciones.
La importancia de estos datos es tal que incluso existen empresas en las cuales se realiza un estudio socioeconómico a los candidatos, el cual incluye una visita domiciliaria, esto para cerciorarse de que todos los datos proporcionados por el candidato son verídicos y que su estilo de vida es compatible con los valores buscados por la empresa, asegurando así un mayor grado de bienestar para ambas partes al trabajar en conjunto.
Recuerda que estos datos son importantes para el proceso de selección, así mismo, puedes asegurarte que serán tratados con la confidencialidad necesaria revisando el aviso de privacidad de la empresa y así quedarte tranquilo al hablar de estos temas.